«La gente ha iniciado la polución, la gente puede pararla». Cuando en los años 70 la industria del plástico se encontró bajo presión para controlar la contaminación causada por el plástico, dieron con una brillante idea para no tener que controlar su producción y poder seguir aumentándola: culparte a ti de esa polución. La llamaron «reciclaje». 50 años más tarde sigue funcionándoles a la perfección.